Una de las formas más habituales de colocarse el pareo es en la cadera, sin embargo, cuidado, porque cuando anudamos el pareo en un lateral solo estamos aportando más volumen a la cadera y lejos de neutralizarla la acentuamos. Para disimularla, debemos subir el pareo a la cintura.
Ahora bien, colocarse el pareo en la cadera es ideal, para las siluetas rectangulares, ya que se consigue definir las curvas.
En cualquier caso, cuando nuestro objetivo es camuflar las caderas, hay que apostar por un pareo liso, de tonos oscuros y sin estampados ni rayas.
2. Pecho de nacimiento Bajo
Si eres de las que tiene el pecho de nacimiento bajo, no te preocupes, alíate al pareo para realzarlo. Aunque el escote palabra de honor no es el más adecuado para este tipo de inestetismos, colocar el pareo alrededor del pecho justo a la altura de la axila es ideal para realzar la delantera. Además, si tienes un pecho pequeño, el nudo dará volumen a tus senos. Apuesta por colores y estampados más llamativos para potenciar o tonos más oscuros para neutralizar.
3. Estructura los hombros
Si tienes los hombros redondeados o caídos, estructúralos con el pareo. Colócatelo de forma asimétrica como puedes observar en el dibujo. El nudo o la lazada será un captador de atención ideal para camuflar este inestetismo. Eso sí, prescinde de esta técnica si tu cuello es más bien corto.
Para colocártelo, tal como recoge Bleucoast, empieza por ajustar el pareo al pecho y deja un lado más largo que el otro. Después, pasa los dos extremos por debajo de los brazos y deja de pasar un poco más de tela para el lado que anudaremos sobre el hombro.
Para colocártelo, dóblalo a lo largo y pásalo en el frente de tu cuello. Cruza los dos lados en tu espalda, en los hombros, y tira hacia adelante, bajo los brazos.
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